martes, 26 de junio de 2012

Origen de la expresión "Mandar al quinto pino"

Empleamos este modismo cuando queremos que alguien se vaya lejos y nos deje de molestar. También se emplea con la frase "el quinto pino" a secas, como manera de indicar que algo o alguien se encuentra en una distancia considerable. Por ejemplo: "Cuánto tarda Miguel, sólo tenía que comprar pan. -Ya, es que la panadería más cercana está en el quinto pino".

Parece ser que la historia del empleo de dicha frase se debe a la plantación que se realizó durante el reinado de Felipe V, allá por el Siglo XVIII, de 5 pinos en un espacio que abarcaba desde el madrileño Paseo del Prado, la calle más larga de la época en la capital española, y lo que hoy sería La Castellana a la altura de Nuevos Ministerios, antiguamente casi en las afueras de la ciudad. El espacio entre ellos era grande por lo tanto.
Era costumbre de sus habitantes citarse en el primer pino, segundo, etc como puntos de encuentro, tal como lo podemos hacer en nuestros días con otros lugares de referencia; sin embargo, las parejas solían quedar en el pino más alejado para evitar las miradas indiscretas: el quinto pino.
Debido a esta amorosa actividad se acuñó el término de lejanía relacionado con dicho pino y con el significado conocido ha llegado a nuestros días.


El Paseo del Prado, Grabado de Ramón de Mesonero, 1845

1 comentario:

  1. a mis amigos y A my nos ha gustado mucho el origen romántico- erótico de la expresión

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