Usamos este modismo como sinónimo de "por si acaso", "por lo que pueda suceder". Por ejemplo: "Aunque no he estudiado nada haré el examen por si las moscas, no vaya a ser que apruebe".
Existen dos teorías principales para el empleo de este uso. Uno de ellos es el higiénico y antiguo gesto de tapar la comida para evitar que los insectos, portadores de enfermedades, estuvieran en contacto con ella; la comida se protegía "por si las moscas" la pudieran estropear.
Ilustración de San Narciso (siglo XVIII) |