La historia de esta expresión se centra en la elaboración del pisto, pero no en la actual, basada en una fritada de diversas verduras en el que el tomate y pimiento forman un papel destacado y cuya introducción en España podría haber sido en el Siglo XV o XVI, sino en su anterior confección, basada en el empleo de diferentes carnes machacadas y sus jugos, de costosa preparación y sólo al alcance de los más pudientes. Tal era el trabajo y el coste de dicho plato, que "darse el pisto" comenzó a relacionarse con el atribuirse un mérito y por lo tanto concederse un "premio" por él, y tal cual, dicha expresión ha llegado hasta nuestros días.
Como curiosidad decir, que mientras el pisto actual se elabora básicamente con tomate, pimiento y calabacín, cuando se sustituye este último ingrediente por berenjena, es denominado "ratatuille".
Pisto Manchego |